La inteligencia artificial tiene múltiples usos en distintas industrias, incluida la práctica del derecho. El uso de la inteligencia artificial permite mejorar los servicios que los abogados ofrecen a los clientes y mejorar la manera de colaborar con otros profesionales y las formas de trabajo dentro de estudios jurídicos y departamentos legales.
¿Qué es la inteligencia artificial?
La inteligencia artificial tiene muchas definiciones. Una manera de describirla es como un sistema que puede recabar datos y en base a ellos tomar decisiones replicando o imitando la inteligencia humana.
En el White Paper La inteligencia artificial desarrollado por Brevity analizamos los riesgos, dilemas y regulación de la tecnología de inteligencia artificial en distintos lugares y ámbitos de aplicación.
A la vez, analizamos cómo las aplicaciones de la inteligencia artificial impactan en la economía y en sectores claves como seguridad, transporte, agricultura, entretenimiento, el marketing y la educación.Un ejemplo cercano para entender su aplicación son los servicios de streaming. Según el contenido que el usuario escoge regularmente, el sistema mejora sus recomendaciones. Puede incluso adaptar las portadas según el gusto del consumidor teniendo varias opciones disponibles y eligiendo la que le resulte más tentadora.
Es por eso que la oferta de dos clientes tendrá no solo distintas recomendaciones incluso varían las presentaciones del mismo contenido. Por eso este tipo de estos servicios valora la puntuación del usuario, es la forma más directa para que el sistema aprenda.
¿Qué puede hacer la inteligencia artificial en el ámbito del derecho?
La inteligencia artificial tiene un gran campo de acción en el mundo del derecho. El ejercicio del derecho y el asesoramiento jurídico no podrán ser jamás delegados en máquinas: se necesita el discernimiento y análisis humano. Pero otro tipo de tareas operativas pueden ser realizadas de mejor manera gracias a la tecnología. Esto deja lugar a que los abogados aporten en lo estratégico, creando mayor valor para su práctica y sus clientes.
De acuerdo al informe “Inteligencia artificial y abogacía”, elaborado por el Consejo General de Abogacía Española, el abogado ‘tradicional va a seguir existiendo y, aunque el servicio jurídico tiene una gran parte de “artesanía”, no podrá quedarse al margen de la transformación tecnológica, entendiendo que “la misma será asumida por las nuevas generaciones”.
¿Y cuales son estos nuevos desarrollos tecnológicos, llevados a lo concreto? En un White Paper de Revista Direito GV, “The Future of Law Firms (and Lawyers) in the Age of Artificial Intelligence”, Anthony Davis recaba algunos de los usos que el derecho le está dando a la inteligencia artificial.